sábado, enero 18, 2014

Julio Cortázar. Clases de literatura (I)


Ha sido un extraordinario regalo de Navidad. Lo he leído de un modo muy especial, como si realmente estuviese escuchando la voz poderosa —con erre francesa— y cautivadora de Julio Cortázar (1914-1984). Claro, porque es verdad que el texto es —dice el «Prólogo» de Carles Álvarez Garriga, editor de la obra— la «transcripción minuciosamente literal» de la grabación de las clases que dio el escritor argentino, entre octubre y noviembre de 1980 en la Universidad de California, en Berkeley. Pero es que es verdad igualmente que me he sentido —más bien, me he sentado— como un estudiante más en aquella aula, viajero a esas mismas fechas —octubre-noviembre de 1980—, en las que yo recibía mis primeras clases como estudiante universitario de literatura. Hace treinta y tres años y pico. Vuelvo al presente; y añado algo que quizá sea interpretado como una exageración además de como un signo de jactancia: me siento mejor profesor desde que terminé de leer este libro, es decir, hace un par de días. Aunque sólo sea porque este libro es la reproducción de unas clases de literatura, es decir, de lo que hoy sigue siendo la mayor parte de mi vida. El profesor menos pedante del mundo dice Carles Álvarez que podría ser el título de este conjunto de charlas. Quisiera asumir esto, como aquello otro que dijo Cortázar en su segunda clase: «[…] el problema es que ustedes son tantos y yo soy tan poco...» (pág. 43). Es un libro inteligente y vivo. Porque trata de la vida, de la vida que hay en las clases de un escritor y en las que reciben unos alumnos que dialogan con su profesor; que, cuando éste dice en su penúltima clase, como el que no quiere seguir molestando, que podrían despedirse ya, recibe por respuesta un contundente ¡Nooo! Me falta hablar de su contenido —espléndido—, que es lo importante. Me he quedado en la superficie, honda superficie. Por cierto, la  fotografía de la cubierta está tomada por la esposa de Cortázar, por Carol Dunlop, allí, en Berkeley en aquellos días.

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