jueves, septiembre 13, 2012

Dos retales


© CMD
Seré breve. Solo dos retales.
Una amiga poeta me dijo hace años, en agosto, que estaba preñada; y yo entendí que estaba premiada. Le di la enhorabuena. Ya he dicho que es poeta. Por algunos de sus libros ha recibido premios. El mejor es una niña hermosa que ahora debe de tener nueve años. También le di la enhorabuena. Me he acordado de aquello hace unos días, al saludar en la calle a la madre y a la hija.
Sermón largo, mueve culos. Ricardo Cantalapiedra lo escribió hace más de una década en El País a propósito de una crítica a un concierto de El Gran Wyoming y Reverendo en Madrid, en la Sala Galileo. Lo he rescatado ahora que el Reverendo ha muerto. Gusta la versión corta del dicho viejo con voluntad de ripio de que Largos sermones más mueven culos que corazones. Convencido estoy de que el noventa por ciento de los conferenciantes que suscriben el dicho no respetan al auditorio y exceden en mucho el tiempo razonable para decir sus palabras. Son los mismos que empiezan su discurso con un temible "Seré breve".

No hay comentarios: